En 2018, los residuos de producción de Essity ascendieron a un total de 1,65 millones de toneladas. Durante el proceso de producción de Essity, los residuos se generan en forma de ceniza, sedimentos, residuos orgánicos o plástico. Las plantas de producción trabajan de forma proactiva para reducir los residuos y encontrar soluciones alternativas para su tratamiento. En 2018, se recuperó una cantidad importante (un millón de toneladas) como materia prima para otras industrias, como el sector de la construcción o como fuente de energía. El resto se envió a un vertedero.